Pero ¿quién vive? (dedicated to...)

Me alegra leer que al hilo de mis últimos escritos, un poco fúnebres, haya salido el tema de Blade Runner, película con uno de los mensajes más poéticos y menos explícitos (de ahí su belleza) sobre la vida (y también sobre la muerte, claro).

Os dejo hoy las palabras de despedida del Replicante Nexus 6. A veces, la grandeza de la vida de un hombre se demuestra en el modo que tiene de enfrentarse a su propia muerte.

Yo... he visto cosas que vosotros no creeríais. Atacar naves en llamas más allá de Orion. He visto rayos C brillar en la oscuridad cerca de la puerta de Tannahäuser. Todos esos momentos se perderán en el tiempo como lágrimas en la lluvia. Es hora de morir.

Este post está dedicado a mi querido Nachete, como no podía ser de otra manera. Tú me has enseñado a amar a Ridley Scott, aunque siento decirte que a veces sea un poco difícil. Es lo que tienen los genios...

2 comentarios

[Paulinchen - 13 de noviembre de 2006 - 18:55]

No podía ser de otro modo: si hablo de Balde Runner te tengo que mencionar, con el coooooooooooñazo que nos has dado durante años, jeje. En mi próxima visita nos hacemos una sesión, que me han entrado ganas de volver a verla.

[Nachus-6 - 09 de noviembre de 2006 - 15:57]

Je Je Je, muchas gracias por tu post, que mejor dedicatoria que las últimas y bellas palabras improvisadas, según dicen, por Rutger Hauer (o Roger Krauer, como le llama Cris). Aunque tienes razón, últimamente es dificil serle fiel, es lo que tienen...pero ¿como puedo no amar al director de "Blade Runner" y "Alien"??.Imposible. Sin olvidar "Thelma & Louise", "Gladiator" o "Los duelistas" (una peli muy buena aunque algo desconocida). Aunque algunas de las virtudes de Blade runner no son directamente responsabilidad de Ridley Scott, él direge la orquesta, oficia la misa, y de ahí mi amor sin más metáforas: Me fascina su historia, TODOS los personajes, la ciudad sucia y lluviosa donde siempre es de noche (Los Angeles 2019), el gran anuncio luminoso de comida china, los paraguas con mango de neón, los juguetes de Sebastian (pobre) que hablan, los dialogos, la escena (hay tantas) del unicornio...en fin, espero que nunca venga un blade runner a hacerme el test de voight kampf, creo que daría positivo y tendrían que "retirarme"